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Wednesday, January 09, 2013

Reexaminando a... Paul Thomas Anderson (Estreno de The Master)

Sidney, hard eight (****)
de Paul Thomas Anderson

La comparación es constante: ¿es Paul Thomas Anderson el nuevo Kubrick? Igual que él, Anderson empezó con pequeñas historias. Luego han sido grandilocuentes, apabullantes. Y aunque sus primeras películas fueran pequeñas, se nota el gusto por lo grande.


Se nota que este Sidney, hard eight es ambiciosa en su modestia. Sidney (memorable Philip Baker Hall) se erige en protector de John (John C. Reilly) tras la pérdida de éste de sus padres. Como lugarteniente de Sidney, John encuentra un oficio en la pequeña industria del juego y la mafia.


Todo va bien hasta que aparece el amor, y aparece la chica (Gwyneth Paltrow). Y todo se complica porque es amor de verdad, amor hasta el límite, y el límite es Samuel L. Jackson, con su conciencia de tipo malo. Pero Sidney, como aquel mítico Sr. Lobo de Pulp Fiction, soluciona problemas, y rápidamente.

Thursday, February 23, 2012

Día 23 - Una peli cuya banda sonora te haya gustado

No me suelo fijar en las bandas sonoras, pero me dejó impactado la de Jonny Greenwood para Pozos de ambición, película con un comienzo fascinante, con una escena memorable (con ayuda musical) pero con cierto bajón al final.

Crítica de un servidor

Monday, March 31, 2008

Criticando, siempre criticando

Pozos de ambición (****)
de Paul Thomas Anderson.


Combate de dos horas y media entre petróleo y religión. Entre los designios de Dios y la ambición desmedida, sin una línea clara que la difiera, se entremezcla como el petróleo con la tierra en esta asfixiante, agobiante película.

Visualmente impecable, notándose de forma excepcional la mano de Anderson, musicalmente imprescindible con Jonny Greenwood (de Radiohead) con algunas secuencias espeluznantes. Fallida a veces, con altibajos tras una primera hora portentosa, destacable dentro del mejor cine hecho, la película deja un poso final importante, con una escena final controvertida.



Daniel Day Lewis contra el mundo. Contra su hijo, contra la religión (genial Paul Dano), contra toda adversidad que se cruce en su objetivo. Aferrado a ese oro negro, enganchado a esa sensación de poder, hará todo lo que pueda y más hasta la locura para ganar. La venganza se sirve bien fría.